¿Se ha producido un cambio difícil en tu vida o es urgentemente necesario?
Sabes que no hay vuelta atrás, pero no sabes cómo seguir.
Tal vez necesitas adaptarte a nuevas circunstancias. Te asaltan las dudas. Reflexionas sobre supuestos errores que has cometido. Esto te hace sentir insegura/o, tienes miedo de tomar decisiones equivocadas y no sabes por dónde empezar. Entonces estás pasando por un momento de crisis.
Los bloqueos de la crisis no son culpa tuya
Las crisis forman parte de la vida: pérdida de un ser querido, accidente grave o enfermedad grave, separación, abandono, infidelidad, pérdida del trabajo. Son situaciones que pueden pasarnos a todos en algún momento. A menudo te golpean de repente y sacuden todo lo que hasta entonces había funcionado bien.
Por eso es normal que al principio no sepas qué hacer. Al fin y al cabo, no estabas preparada/o. Necesitas tiempo para procesar los momentos de shock y aún no tienes una forma de enfrentarte a situaciones que nunca te habían ocurrido. Es de esperar un bloqueo en forma de estrés, ansiedad, tal vez incluso episodios de depresión e insomnio. Es un momento emocionalmente muy difícil entonces es importante prevenir afectaciones mayores como el desarrollo de un trastorno del estado de ánimo.
¿Por dónde empezamos con la intervención en crisis?
No tenemos que trabajar en el cambio inmediatamente. La mayoría de las personas que acuden a mí en un momento de crisis sienten primero la necesidad de hablar y ser escuchados. Quieren descargar lo que les da vueltas en la cabeza. Yo estoy ahí para asegurar que no nos perdemos.
Luego nos planteamos por dónde empezar. ¿Cuáles deberían ser los primeros pasos? No se trata de poner orden rápidamente, sino de analizar qué es lo más importante para ti. ¿Qué resultado esperas? ¿Cuál sería un buen comienzo en este caso?
Las crisis y el juez interior
En la intervención en crisis, me doy cuenta una y otra vez de que muchas personas son muy duras consigo mismas. A menudo se sienten culpables y piensan que podrían haber evitado el suceso de alguna manera. Algunos se sienten castigados y avergonzados. Otros se castigan aún más despreciándose a sí mismos por su supuesta incompetencia. Esto es muy perjudicial para su autoestima y duplica el dolor. Sufres no sólo por el cambio, sino también porque lo interpretas de tal manera que eres culpable o víctima.
Por tanto, una parte importante del asesoramiento en crisis es practicar la autocompasión
Si la crisis fuera un viaje difícil, ¿a quién querrías a bordo? ¿Un juez estricto que te regañara constantemente y te dijera lo que estás haciendo mal, o un buen amigo que te animara, te diera reconocimiento y valor?
La autocompasión no es tenerse pena. Significa aprender a ser un buen compañero para uno mismo. En otras palabras, pedir al ruidoso juez interior que haga silencio y tome asiento para decirse algo como: "Este es un momento difícil para mí, no es fácil resolver eso, estoy luchando. Pero es parte de la vida también.” “¿Qué le diría a un buen amigo si estuviera en una situación como ésta?".
¿Cómo suena eso para tí?
Las crisis como posibilidad
El carácter chino para crisis, "Wéijī", se compone de dos palabras:
Wéi = peligro/riesgo, Jī= oportunidad. Aquí, por tanto, está muy claro que los golpes del destino son siempre también oportunidades.
En el momento de la crisis, todavía no se puede ver esto porque el miedo y el dolor son demasiado grandes. En el momento es difícil imaginar lo que idealmente podría surgir de esta situación. Dependiendo de cómo afrontes la situación, puedes salir de ella más fuerte o más débil.
Aprovecha la crisis como una oportunidad y busca ayuda. No se trata de tener que hacerlo solo.
¿Cuánto tiempo se tarda en superar una crisis?
Esto varía mucho y también depende de la experiencia que hayas tenido antes con la intervención en crisis. Cada vez superamos mejor los momentos difíciles. Al menos cuando salimos fortalecidos de ellos.
Para mí es importante que te lleves algo de cada conversación conmigo. No queremos alargarnos demasiado, pero tampoco queremos dejar nada importante. Puede que solo necesites una hora para hablar con alguien y tener una perspectiva más clara. Pero también puede ser que lleves mucho tiempo dando vueltas en círculo y quieras un apoyo más a largo plazo.
Las crisis pueden impulsar sensaciones muy fuertes
El nivel de sufrimiento en una situación de crisis varía. Por eso es importante determinar si la atención en línea es idónea en tu situación o si lo recomendado sería un proceso psicoterapéutico presencial. Por ejemplo, si la desesperación es tan grande que estás pensando en hacerte daño, si sufres ataques de pánico graves o si padeces episodios depresivos muy fuertes o afectaciones del sueño desde hace varias semanas.
Obtenemos una visión general durante la consulta inicial gratuita
Durante una primera consulta gratuita, podemos determinar qué vía de tratamiento es la más adecuada para ti. Para eso revisaremos tus síntomas y posibles factores de riesgo. En caso que te decidas por trabajar conmigo, averiguamos qué esperas obtener del proceso, qué serían tus deseos y objetivo para salir fortalecida/o de esta situación. Para mí sería un gusto conocerte.