Meinungsverschiedenheit

Las diferencias de opinión en una relación son completamente normales

Desacuerdos surgen por diferentes perspectivas, experiencias o necesidades y son completamente normales en cualquier forma de relación. Suelen provocar emociones como la frustración, la ira o quizá el miedo, por eso también pueden desembocar discusiones fuertes o peleas.

Las diferencias de opinión aportan información importante sobre la relación

Las discusiones pueden acabar rápidamente en sentimientos heridos y dudas. A menudo te arrepientes de lo que has dicho o llegas a cuestionar mucho de tu relación.

Los momentos difíciles de tu relación dicen más que los momentos felices. Durante una crisis, se suele conocer una faceta completamente distinta de la pareja. Esto puede reflejar mucho sobre ella como persona, pero también sobre ustedes como pareja. Por eso es útil observarlas más de cerca. ¿En qué hay que fijarse?

Hay dos cuestiones cruciales en caso de diferencias de opinión:

  1. ¿Sobre qué discuten? (Contenido)
  2. ¿Cómo lo discuten? (Proceso)

Los temas sobre los que discuten son cruciales, ya que pueden revelar mucho sobre su compatibilidad. A continuación, exploramos más este tema.

Cómo discuten o cómo reacciona el uno ante el otro cuando no están de acuerdo es importante, porque ahí es donde podemos reconocer si hay respeto.

¿Sobre qué discuten? (Contenido)

Las diferencias de opinión pueden existir a varios niveles. Pueden ser cosas cotidianas como:

 

- ¿Cómo se cargan los tenedores en el lavavajillas?

- ¿Cuándo está realmente lleno el cubo de la basura?

También pueden ser preguntas de mayor alcance, como:

- ¿Cuánta televisión pueden ver los niños?

- ¿En qué gastamos nuestro dinero y cómo queremos organizar nuestras finanzas?

- ¿Cómo queremos organizar nuestro tiempo libre?

O temas que tienen más que ver con la personalidad y la identidad:

- Religiosidad y espiritualidad.

- ¿Con qué estilo de crianza quieres educar a tus hijos?

- Sus valores personales, deseos, proyectos y límites.

 

El cubo de la basura es sólo el detonante

Normalmente se puede encontrar rápidamente una solución para cuestiones cotidianas como el lavavajillas o el cubo de la basura. O, si otros aspectos de la relación encajan, aprendemos a vivir con el hecho de que discutiremos sobre estos temas de vez en cuando.

Si estas situaciones más cotidianas desencadenan discusiones mayores en las que se vuelven hirientes, suele haber razones más profundas detrás. El cubo de la basura es sólo el detonante.

No siempre se trata de llegar a compromisos

Las diferencias de opinión relacionadas a valores o principios diferentes son más complejas. No se trata de llegar a un compromiso o de aceptar que la otra persona simplemente piense diferente. La cuestión es si pueden conciliar sus diferencias, porque si no lo pueden o no quieren, chocarán una y otra vez en temas que son extremadamente importantes para por lo menos uno de los dos.

Un ejemplo práctico

Una vez trabaje con una mujer que se sintió en un dilema. Según ella, la honestidad era sumamente importante para ella. Sin embargo, no dejaba de descubrir a su pareja en pequeñas mentiras “blancas” (como él decía). Aun la enfadaba muchísimo, siempre lo dejaba pasar. Hubo discusiones constantes porque esas mentiras la molestaban cada vez más.

Ambos coincidían en que nunca se trataba de grandes problemas. Su pareja quería evitar discusiones y a menudo ocultaba la verdad para mantener la armonía. Él no entendía por qué ella estaba tan enfadada. Al final, él llevó el coche al taller, solo que fue más después te lo que dijo.

 

La mujer estaba cada vez más molesta por las mentiras (más que por las situaciones) y también por el hecho de que su pareja no entendiera por qué la verdad era tan importante para ella. También le molestaba no poder ser más coherente y quería establecer límites más claros. Entonces llegaron a mi consulta.

Valores diferentes no significa automáticamente que no sean compatibles

En el ejemplo que acabo de dar, la situación se podría desarrollar de diferentes maneras. En las consultas, trabajamos primero sobre comprensión y empatía hacia ambas partes. Luego vemos si los puntos de vista sobre el tema han cambiado en algo.

En el caso de esta pareja, llegamos a comprender que el señor utilizaba las mentiras como una estrategia protectora cuando era niño con sus padres. Le habrían castigado si se hubieran enterado de la verdad. A través de la consulta entendió que, en su relación actual, con su pareja, le estaba permitido decir la verdad, por tanto, pudo abrirse los valores de su novia e incluso verlos como un enriquecimiento.

Detrás de las diferencias de opinión siempre hay valores y necesidades

Si te das cuenta de que tienes que ceder demasiado o dejar pasar cosas que realmente te molestan para evitar discusiones, entonces es importante que te preguntes por tus necesidades y valores subyacentes. En el asesoramiento de parejas, queremos descubrirlos, nombrarlos y luego revisar hasta qué punto pueden conciliarlos.

¿Cómo lo discuten? (Proceso)

Mi próxima entrada en el blog tratará sobre la segunda cuestión: ¿Cómo llevan sus discusiones? ¿Cómo se enfrentan cuando se dan cuenta de que están en desacuerdo? Esta fue una gran ventaja para la pareja que mencioné aquí como ejemplo. Gracias al respeto y su apertura, pudieron acercarse a los valores y necesidades del otro y encontrar juntos una solución.

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